Cómo crear tu sello artístico como profesional del tatuaje

En la profesión del tatuaje nunca paras de evolucionar.

Hay tanto por aprender y descubrir que todo lo que absorbas tanto de tu experiencia como de la de otros será clave para formarte, pero eventualmente llegará el momento en el que necesitarás destacarte, trabajar lo que te apetece como artista y crecer como profesional. Entonces, construir tu propio estilo de tatuaje será fundamental.

Aunque crear un sello personal artístico no es sencillo, te puede retribuir a nivel personal y profesional.

Es por eso que indagar en lo que te caracteriza como artista y esforzarte descubrir el estilo que más te identifica, lo vale. ¿Quieres saber cuáles son las ventajas de hacerlo? Sigue leyendo.

Ventajas de desarrollar tu estilo personal de tatuaje

Fortalecer tus conocimientos y habilidades

Al embarcarte en esta profesión, es necesario comenzar por aprender a tatuar de todo un poco para asentar las bases y saber cómo hacerlo bien. Sin embargo, decantarte por un estilo concreto te permite ir un paso más allá, al ahondar en ciertos aspectos que te ayudan a ganar expertise y dominar tu especialidad. Al final, cerrar el embudo de posibilidades te habilita un mejor margen para poner a punto el tipo de tatuajes que haces.

Saber ejecutar varios estilos de forma regular no es lo mismo que dominar uno con excelencia.

Asimismo, la práctica ayudará a que ganes velocidad, seguridad y confianza, llegando incluso a adoptar tus propios métodos de trabajo. Lo que eventualmente te llevará a conseguir mejores resultados en menor tiempo… un factor que es muy valioso.

Diferenciarte de la competencia

Con el próspero auge actual del tatuaje, el talento abunda. Hoy, todo es personalizable y lo original cada vez tiene más demanda, incluso en nuestro sector.

Nada más beneficioso que desarrollar tu valor diferencial para ganar visibilidad y consolidar tu posición en el mercado.

Si consigues crear un sello propio distintivo, lograrás posicionarte como referente. Obvio que no será de la noche a la mañana, pero poco a poco, con constancia y perseverancia, no será difícil que reconozcan tu arte, aún fuera de contexto.

Reducir costos y aumentar ingresos

Elegir un estilo propio no solo repercute en tu técnica, sino también en las tintas, agujas y máquinas con las que trabajes, ya que no son los mismos materiales para cada uno. Luego hay otros factores que influyen en el valor de tu trabajo. Pásate por aquí si te interesa saber más: Desglosando el sueldo de un profesional del tatuaje.

Volviendo al estilo, cuando eres generalista, necesitas un equipamiento más amplio. Pero, en cuanto te especializas en un estilo concreto, puedes reducir tu lista de materiales para tatuar. Asimismo, lo exclusivo suele valer más, pues, algo especial, único e irrepetible no vale lo mismo que algo hecho en serie.

Es decir, un diseño propio original puede significar un plus económico.

A largo plazo, esto te supone una ventaja, porque permite una mayor valoración de tu obra, lo cual puede ayudarte a tener menos carga laboral y más libertad horaria para continuar tu formación y mejorar tus habilidades.

Explotar tu potencial artístico

Como todo arte, el tatuaje es una forma de expresión que te permite jugar con la creatividad y exponer tus intereses. Y como tal, no deja de ser una medio de comunicación igual que cualquier otro, solo que este no se plasma en un lienzo, sino que en la piel.

Los diseños simples y pequeños son muy útiles para ir ganando experiencia mientras practicas, pero a la hora de crecer como profesional del tatuaje, será fundamental saber hacerlos más complejos y adaptarlos tanto a tus clientes, como a tus gustos. Es decir, eventualmente, no será suficiente tatuar lo que venga, ni tampoco sentirte como una impresora humana.

Partir de la idea de tu cliente, explorar tu creatividad y darle tu toque personal será lo que te ayude a destacar y alcanzar la plenitud artística.

Difundir tu obra y darte a conocer

Está claro, todo lo que es único, distinto y excepcional, vende. Piensa sino en cuando ves algo novedoso que nunca has visto antes, te llama la atención, ¿verdad? De la misma manera, establecer un sello personal en tus tatuajes ayudará a captar la atención de quienes se identifiquen con tu estilo.

Lo que se traduce en posibles clientes dispuestos a tatuarse contigo, porque tu estilo resuena con ellos y saben que lo puedes hacer.

Algunos piensan que decantarte por un estilo, te cierra puertas, pero sucede lo contrario, ya que lo que haces es definir el tipo de arte que quieres hacer, y eso, naturalmente te conecta con gente que no solo lo llevaría en la piel, sino que lo recomendarían, porque es distinto a lo que han visto, es excepcional.

Además, si tu estilo denota una estética identificable, eso hará que reconozcan tu marca personal. Tenlo presente sobre todo cuando escojas qué tatuajes publicar tanto en tu porfolio como redes sociales. Y como consejo extra, quédate con los que sientas que mejor te representan.

Ya habrás notado los beneficios de construir tu estilo de tatuaje personal. Ahora, la gran pregunta es: ¿cómo hacerlo?

Paso a paso para crear tu sello personal en tatuajes

Maneras hay muchas. Tus conocimientos, experiencias y virtudes serán lo que terminen de definirla. Simplemente, ten en cuenta que tu estilo propio no es algo que resolverás de un día al otro, sino que hará falta indagar bastante en ello. Es un proceso que requiere mucha investigación, prueba y error.

Igualmente, para llegar a tatuar lo que te gusta, existen un par de acciones que pueden ayudarte a encaminarte. Quédate que ahora viene lo más interesante.

1. Comienza diseñando de todo un poco

Tener tu estilo propio igual suena como el sueño idílico de todo profesional del tatuaje, pero no se puede sacar partido a este oficio sin antes consolidar lo básico…

Empezar por ser generalista es fundamental para practicar, testear tus habilidades y ganar confianza. Este será el primer paso para descubrir cómo hacerlo distinto y a tu manera.

Así que, lo más sensato es comenzar por diseños sencillos, poco pretenciosos y que conlleven un menor riesgo. Un buen ejemplo de ello son los tatuajes flash, o Walk In, como también se los conoce. Aquí es cuando podrás investigar nuevas técnicas, sumar trabajos a tu porfolio que te ayuden a conseguir clientes, poco a poco hacerte un nombre en la profesión, y sobre todas las cosas, acumular experiencia para mejorar tus habilidades.

2. Aprende las bases de cada estilo

Para entender cuál estilo va mejor contigo, hará falta explorar todas las posibilidades que tienes a tu disposición. No solo para conocer las reglas, sino también para eventualmente saber cómo romperlas.

Hoy en día existen muchos estilos. Hay más de 40 entre los tradicionales y sus derivados. No es necesario aprender a realizarlos todos —de hecho, no todos los estilos de tatuaje son aptos para principiantes— pero tener una noción básica de las diferentes características y técnicas es fundamental, más que nada porque la ejecución de un Realismo difiere mucho de la de un Blackwork…

Entonces, en primera instancia, indaga todo lo posible en el arte del tatuaje, investiga métodos, tendencias, y échale un ojo al trabajo de demás tatuadores. Te ayudará a inspirarte, y tener nuevas ideas para crear.

• Pro tip: ¿Sabías que nuestros MasterCourses de tatuaje te enseñan toda la metodología y técnica desde la experiencia de un Master? Lo más sensato es empezar por aprender con qué tatuar, cómo hacerlo y a través de qué maneras ;)

¿Y si tengo dudas sobre el estilo por el cual decantarme?

¡No desesperes! Ser versátil y saber realizar más de un estilo es muy ventajoso cuando recién comienzas y lo que más buscas es conseguir experiencia.

Es decir, aunque no sepas qué estilo prefieres, igual podrás ir aprovechando el proceso para conseguir clientes. Enfocarte en esta fase ya te servirá para ir practicando y poco a poco perfeccionando tu estilo hasta que, por inercia, termines decantándote por el que te sientas más a gusto.

3. Explora tus intereses y gustos personales

En cuanto estés indagando en los distintos estilos y sus diferentes maneras de ejecutarlos, te convendrá hacer un trabajo de observación. O sea, examinar tus diseños y buscar esa cualidad distintiva tuya, ya sea un elemento que reiteras sin darte cuenta, un motivo, un trazo, una forma, una gama de colores, o bien una textura, un tipo de relleno o sombreado… cualquier cosa que sientas que caracteriza tus tatuajes, y que los vuelve tuyos.

Desarrollar tu estilo personal es un proceso de autodescubrimiento, de identificar en qué te desenvuelves mejor, qué te caracteriza y con qué te sientes más a gusto.

Podríamos decir que es muy introspectivo.

Esto va de expresar algo muy tuyo, ya sea una virtud con la que acarreas, o unos conocimientos previos que pueden bien adaptarse al tatuaje, sea porque vienes del ámbito de la arquitectura, bellas artes, diseño, ilustración, o similares… Toda experiencia previa es válida y traspolable.

Al final, a la hora de desarrollar tu estilo personal, el objetivo primordial es que disfrutes haciéndolo porque no es algo forzado, sino que sale de forma natural. Porque nace de ti, y no de otro.

4. Haz muchas pruebas hasta dar en el clavo

A diferencia de cómo muchas personas creen, el estilo no se busca, sino que te encuentra.

Hace falta paciencia, perseverancia, prueba y error, investigación, tiempo y muchísima práctica… Pero, si consigues concentrarte en afinar tu técnica e indagar distintas formas de resolver tus diseños, llegará el momento en que darás en el blanco, y ya ni dudarás de cuál es tu sello personal característico. Entonces, ve con la calma y prueba a rienda suelta todo aquello que te interese. Aquí van un par de consejos para orientarte en el proceso de diseño de tus tatuajes.

Ante todo, incentiva tu destreza creativa y practica todo lo que puedas sobre el papel; es el lienzo ideal para explorar tu faceta artística, y es cuando las ideas mejor fluyen.

Una habilidad esencial para defenderte como profesional del tatuaje es saber dibujar, porque te facilita herramientas y te da libertad de creación. Todo artista del tatuaje que sabe dibujar, tiene la ventaja de poder tatuar cualquier diseño a su antojo. Así que, si aún lo tienes pendiente, te convendrá aprender técnicas de dibujo tanto en medios tradicionales como digitales.

• Pro tip: ¿Hay algún factor común en tus diseños? Prueba este ejercicio: dibuja cuanto puedas sin un objetivo concreto y examina tus creaciones hasta descubrir eso que repites casi sin darte cuenta.

5. Disfruta y continúa creciendo

Esta ha sido una sencilla recapitulación de consejos, pero no olvides que hay muchas formas de desarrollar tu estilo propio. Al final, nadie sabrá mejor que tú qué quieres conseguir como profesional del tatuaje.

Si te ilusiona destacarte con tu arte y que te escojan no solo porque te dedicas al tatuaje, sino por cómo tatúas tú, entonces ya llevas la delantera. Pero, si no es tu objetivo primordial y solo te interesa tatuar diseños de alguien más, entonces ten en cuenta que probablemente no encuentres tu sello característico.

Al final, tu motivación será clave para triunfar en el mundo del tatuaje. Si trabajas con suficiente aspiración, entusiasmo y compromiso, no será difícil hacerte tu merecido lugar.

Solo tú decidirás hasta dónde evoluciona tu estilo.

Tan solo preocúpate por trabajarlo bien, mientras continúas explorando nuevos métodos y alternativas, ya que el camino no termina en cuanto hayas encontrado tu sello distintivo, sino que siempre podrás seguir indagando y evolucionando como profesional del tatuaje. Tanto como te apetezca.

Es lo lindo de esta profesión. Jamás paras de aprender y siempre hay tiempo para seguir poniéndote a prueba.

Aún así, el oficio del tatuaje conlleva tanta dedicación, que también puede convertirse en un arma de doble filo. Tomar malas decisiones puede incluso ocasionarte una mala experiencia trabajando de tu talento. Así que, aunque tengas que dar todo de ti, ¡nunca olvides disfrutarlo! Amar lo que haces es el secreto para convertir tu pasión no solo en un sustento económico, sino también en una realización personal satisfactoria.

Y cómo recomendación final, no permitas que dar con tu estilo te quite el sueño. Vuelca toda tu energía en mejorar como artista, y eventualmente llegará a ti.

Y tú, ¿ya estás comenzado a desarrollar tu estilo personal? Esperamos que estos consejos te ayuden a conseguirlo. Si te atrae explorar tu creatividad, igual te interesa especializarte en tatuaje Blackwork, un estilo que se presta muy bien para ello...

¿Y qué mejor que aprenderlo en profundidad de la mano de un profesor de dibujo para tatuaje especializado en este complejo pero atractivo estilo?

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